El sector de la iluminación ha avanzado mucho en los últimos años. Las lámparas incandescentes tradicionales se han ido sustituyendo de forma progresiva por otro tipo de luminarias, hasta obtener soluciones muy variadas de halógenos, fluorescentes y sobre todo led. A continuación mostraremos las características de estos tipos de iluminación.
Diferente iluminación para distintas necesidades
Halógenos para destacar en intensidad
Las lámparas halógenas son el relevo en características de las incandescentes. Funcionan mediante un gas que se calienta a alta temperatura en el interior de la lámpara. La luz es blanca e intensa, y el tamaño de la luminaria es muy pequeño, por lo que son una opción ideal cuando necesitamos focalizar la luz. Además, pueden incorporar reflectores para que el foco sea direccional. Se encienden rápidamente, aunque emiten bastante calor, y aunque su consumo es menor que las incandescentes, es superior a otras opciones.
Fluorescentes para una luz uniforme y eficiente
Los tubos fluorescentes permiten una difusión de la luz uniforme, lo cual los hace una buena opción en espacios donde no queramos sombras molestas o deslumbramientos, como es el caso de espacios de trabajo. Además, permiten adaptar la tonalidad de la iluminación a las diferentes necesidades. Sin embargo, requieren un tiempo para calentarse.
Led para una mayor versatilidad
Las luminarias led son diodos emisores de luz que ofrecen una gran cantidad de opciones de iluminación. Son muy duraderas, su gasto energético es muy bajo, emiten poco calor, son más resistentes que las que están hechas a base de filamentos y ofrecen una luz nítida y clara. No obstante, son algo más caras y no tan potentes como por ejemplo las halógenas.
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